GEOGRAFÍA DE UN CUERPO CELESTE
LOURDES MÍNGUEZ
Capri, verano de 1980. Anna, estudiante de Pintura, y Lulú, su jefa en el museo en el que trabaja, viven su historia de amor envueltas entre el deseo y el misterio de la isla. Un día Anna conoce a Simón Vela, un artista con el que empieza a quedar a escondidas de Lulú. Simón le mostrará la escultura en la que trabaja, Selene en la Tierra, con la que quiere representar a la luna y su deseo de ser perpetua, pero lo que más conmueve a Anna es el reflejo de su soledad. A partir de ese momento, su vida empieza a verse arrollada por las sensaciones de aquella obra y por una atracción que no comprende hacia el artista.
Geografía de un cuerpo celeste presenta un recorrido por las emociones más íntimas tras el verano en que Anna, Lulú y Simón comienzan su historia. A partir de la sensibilidad de dos mujeres representadas por la misma soledad, la novela navega por el interior de los protagonistas a lo largo del tiempo para mostrar cómo la vida, el arte y el amor nos guían a través de la huella que dejamos en los otros.
LOURDES MÍNGUEZ
Capri, verano de 1980. Anna, estudiante de Pintura, y Lulú, su jefa en el museo en el que trabaja, viven su historia de amor envueltas entre el deseo y el misterio de la isla. Un día Anna conoce a Simón Vela, un artista con el que empieza a quedar a escondidas de Lulú. Simón le mostrará la escultura en la que trabaja, Selene en la Tierra, con la que quiere representar a la luna y su deseo de ser perpetua, pero lo que más conmueve a Anna es el reflejo de su soledad. A partir de ese momento, su vida empieza a verse arrollada por las sensaciones de aquella obra y por una atracción que no comprende hacia el artista.
Geografía de un cuerpo celeste presenta un recorrido por las emociones más íntimas tras el verano en que Anna, Lulú y Simón comienzan su historia. A partir de la sensibilidad de dos mujeres representadas por la misma soledad, la novela navega por el interior de los protagonistas a lo largo del tiempo para mostrar cómo la vida, el arte y el amor nos guían a través de la huella que dejamos en los otros.
LOURDES MÍNGUEZ
Capri, verano de 1980. Anna, estudiante de Pintura, y Lulú, su jefa en el museo en el que trabaja, viven su historia de amor envueltas entre el deseo y el misterio de la isla. Un día Anna conoce a Simón Vela, un artista con el que empieza a quedar a escondidas de Lulú. Simón le mostrará la escultura en la que trabaja, Selene en la Tierra, con la que quiere representar a la luna y su deseo de ser perpetua, pero lo que más conmueve a Anna es el reflejo de su soledad. A partir de ese momento, su vida empieza a verse arrollada por las sensaciones de aquella obra y por una atracción que no comprende hacia el artista.
Geografía de un cuerpo celeste presenta un recorrido por las emociones más íntimas tras el verano en que Anna, Lulú y Simón comienzan su historia. A partir de la sensibilidad de dos mujeres representadas por la misma soledad, la novela navega por el interior de los protagonistas a lo largo del tiempo para mostrar cómo la vida, el arte y el amor nos guían a través de la huella que dejamos en los otros.